La hipnosis es un tema que ha sido objeto de mitos y malentendidos durante muchos años.
A menudo se asocia con la idea de una persona que se queda dormida y pierde el control, o incluso con la idea de un control mental malvado. En este artículo desmentiré algunos de los falsos mitos de la hipnosis y explicaré lo que realmente implica esta técnica. En éste artículo, desmentiré algunos de los falsos mitos de la hipnosis y explicaré lo que realmente implica esta técnica.
Mito 1 : La hipnosis es un estado de sueño profundo.
Muchas personas creen que la hipnosis es similar a estar dormido o en un estado de trance profundo. Sin embargo, la hipnosis en realidad implica un estado de concentración y relajación y no es necesario estar en un estado de sueño para experimentarla. Si se tratara de sueño, sería imposible el estado de relajación. De hecho, durante una sesión de hiposis, la persona está completamente consciente y puede hablar y responder preguntas.
Mito 2: La hipnosis es peligrosa.
Otro mito común sobre la hipnosis es que puede ser peligrosa y que puede hacer que una persona haga cosas en contra de su voluntad. Esto, simplemente no es cierto, La hipnosis es una técnica segura, ya que la persona es plenamente consciente.
Mito 3: La hipnosis solo funciona en personas crédulas.
Algunas personas creen que la hipnosis solo funciona en personas crédulas o que tienen una mente débil. Esto tampoco es cierto. Cualquier persona puede experimentar la hipnosis, siempre y cuando estén dispuestos a participar en el proceso y permitir que su mente se relaje y se concentre.
Mito 4: La hipnosis puede curar cualquier problema o enfermedad.
La hipnosis no cura, pero sí es una herramienta que nos permite acceder la información inconsciente, dónde se han quedado registrados y bloqueados traumas e impactos emocionales, para llegar al orígen de los problemas y enfermedades.
Mito 5: La hipnosis solo se usa para entretenimiento.
A menudo, la hipnosis se asocia con espectáculos de entretenimiento en los que una persona es hipnotiZada y luego se le hace hacer cosas divertidas en el escenario. En el espectáculo, la persona tiene que estar en un estado de relajación aún mas profundo. Aún así conscientemente se prestan a dejarse llevar y a seguir las sugestiones a voluntad propia.
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